El mundo del handball pasa por un momento crítico. Se aproximan las elecciones de la federación y existen dos bandos que están dividiendo a los jugadores.
Los dirigentes están en el ojo del huracán. Sin darse cuenta separan a los propios jugadores creando un ambiente denso en las canchas y en los entrenamientos de la selección, lo que provoca más roce de lo común llegando a tal punto que en cualquier momento un deportista se podría lesionar, y todo debido a las disputa de los cabecillas del handball chileno.
Esto no es nada nuevo, en la historia de los deportes los administrativos han marcado la pauta. Recordemos el caso de Chiledeportes, que dejó de manifiesto la poca seriedad que da el gobierno al deporte nacional.
Si en una institución tan importante existen irregularidades de ese tipo imagínense qué puede pasar en una federación que no tiene ningún tipo de control, donde los bandos pelean por quedarse con la presidencia y tener el poder absoluto de este deporte. Tratan de ganarse el voto de las regiones prometiendo cambios que no son posibles y hasta creando sus propias asociaciones para tener derecho a otro voto.
¿Qué es realmente lo que quieren? Si el handball sigue así no tienen ningún derecho a exigir buen rendimiento en la cancha ni en los campeonatos internacionales. ¿Han pensado lo que está en juego? Miles de jugadores se han esforzado durante años, han dejado de lado a sus familias, amistades y hasta los estudios para que Chile crezca deportivamente; y lo único que reciben los deportistas a cambio son problemas dirigenciales que, entre muchas otras cosas, se les impide entrar a los lugares de entrenamiento y desarrollarse como es debido en un deportista de alto rendimiento.
Los dirigentes están en el ojo del huracán. Sin darse cuenta separan a los propios jugadores creando un ambiente denso en las canchas y en los entrenamientos de la selección, lo que provoca más roce de lo común llegando a tal punto que en cualquier momento un deportista se podría lesionar, y todo debido a las disputa de los cabecillas del handball chileno.
Esto no es nada nuevo, en la historia de los deportes los administrativos han marcado la pauta. Recordemos el caso de Chiledeportes, que dejó de manifiesto la poca seriedad que da el gobierno al deporte nacional.
Si en una institución tan importante existen irregularidades de ese tipo imagínense qué puede pasar en una federación que no tiene ningún tipo de control, donde los bandos pelean por quedarse con la presidencia y tener el poder absoluto de este deporte. Tratan de ganarse el voto de las regiones prometiendo cambios que no son posibles y hasta creando sus propias asociaciones para tener derecho a otro voto.
¿Qué es realmente lo que quieren? Si el handball sigue así no tienen ningún derecho a exigir buen rendimiento en la cancha ni en los campeonatos internacionales. ¿Han pensado lo que está en juego? Miles de jugadores se han esforzado durante años, han dejado de lado a sus familias, amistades y hasta los estudios para que Chile crezca deportivamente; y lo único que reciben los deportistas a cambio son problemas dirigenciales que, entre muchas otras cosas, se les impide entrar a los lugares de entrenamiento y desarrollarse como es debido en un deportista de alto rendimiento.
Si no se llega a una pronta solución muchos jugadores piensan en el retiro porque, aunque cueste creerlo, esto es muy importante para ellos, y estar en una cuerda floja de no saber qué es lo que va a pasar, si se viaja o no, si se juega o no, los tiene estresados.
Miles de interrogantes han provocado en los fanáticos del balonmano nacional una gran desilusión, los cabecillas se han encargado de manosear este maravilloso deporte que todos amamos y lo han dejado con un futuro incierto que deja abierta la posibilidad de acabar con todo lo construido a nivel internacional y nacional.
Es importante mencionar los grandes logros que se han obtenido a nivel sudamericano y todos los avances que existen en regiones que, con mucho esfuerzo, han logrado formar su propio mundo handbolístico sacando adelante a sus jugadores y a los campeonatos regionales que han obtenido una importancia considerable a nivel nacional.
Basta de conflictos extra deportivos, llegó la hora de que los propios deportistas tengan la posibilidad de elegir a sus dirigentes, o ¿Será que éstos no creen en sus capacidades administrativas?
2 comentarios:
¿Entrenar en calidad de urgente???
¿Es una broma? algo está pasando y para variar nosotras (las jugadoras) vamos a ser las últimas en enterarnos.
Qué pasa con los dirigentes, ¿viajamos o no? y ¿cuándo nos piensan decir? Estamos todas, o la gran mayoría, en la universidad algunas hasta están haciendo la práctica y necesitamos ordenar nuestros tiempos. Si se sabe algo que nos avisen con tiempo, por el bien de todos y la tranquilidad de las jugadoras.
Ese es nuestro pais, nose si algun dia cambiarà, y lo peor de todo es que nunca nadie ha pagado a muchos deportes incluido el handball, todo es por amor al deporte.
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